Un 21 de agosto de 1981, hace 40 años, se estrenaba Un
Hombre Lobo Americano En Londres, como bien he dicho en artículos anteriores,
este fue un año muy licántropo.
La película es todo un referente en lo que a hombres
lobo se refiere, cargada de humor negro combinada con grandes escenas de brutalidad
sin límites.
David Kessler y Jack son dos jóvenes estadounidenses que, con sus mochilas a cuestas, han decidido pasar tres meses recorriendo Europa. En Inglaterra, en una zona rural desolada, la gente les da unos consejos escalofriantes: "no os apartéis del camino y no salgáis al páramo", "cuidado con la luna". Cuando los jóvenes emprenden la marcha en la oscuridad, oyen un aullido terrorífico procedente de los páramos, pero no saben que los persigue una bestia legendaria sedienta de sangre, cuyas víctimas se convierten en muertos vivientes que deben vagar por la Tierra eternamente; en cambio, quienes escapan con vida tienen reservado un destino diferente.
El director John Landis fue el responsable de dirigir esta maravillosa cinta, además de escribir el guion. Landis escogió Londres como lugar de rodaje por su gótico victoriano, hogar de Jack el Destripador o Jekyll y Hyde, aunque su intención era mostrar un Londres mas actual como el de 1981.
En ella el director nos regala varias referencias a las clásicas películas de la Universal como la famosa estrella de cinco puntas que aparecía en la mano de las victimas en El Hombre Lobo protagonizada por Lon Chaney Jr, o como este ser tiene que ser destruido por alguien que lo ame. Si es verdad que ente filme el director obvio completamente la referencia a utilizar la plata para acabar con el licántropo, pero si uno se para un momento a pensar, es que ni siquiera lo necesita o por lo menos en un primer visionado no te percatas de ello, pues te encuentras tan concentrado en la película que ni siquiera te das cuenta de ello.
A parte de la escena de la transformación que me
parece una salvajada, creo que una de las escenas más terroríficas para mí fue
el sueño que tiene el protagonista cuando aparecen aquellos hombres lobos
vestidos de soldados y masacran a la familia de David.
En el apartado técnico, desde un principio el director contaba para sus efectos especiales con el especialista Rick Baker, mientras tanto Landis intentaba sacar a delante el proyecto y viendo que se demoraba mas de la cuenta, Baker fue contratado por Joe Dante para hacer Aullidos.
Habiendo conseguido el dinero Landis reclamo los
servicios de Baker para hacer su película teniendo que dejar la producción de
Aullidos en manos de su ayudante Rob Bottin. Tras esta guerra por los
maquilladores, volvemos a proponer esta pregunta ¿A quien quieres más, a Papa o
a Mama? Ya que ambos filmes se estrenaron en el mismo año, las das son películas
de hombres lobo y para colmo en las dos estuvo Baker implicado.
Al final fue Un Hombre Lobo Americano en Londres fue quien se llevó el lobo al agua, ya que todos sabemos lo eficaces que fueron aquellos resultados, consiguiendo ser la primera película en ganar un Oscar al mejor maquillaje.
Bajo mi punto de vista y sin llegar a desprestigiar la
gran labor realizada por Baker, pienso que el trabajo de Bottin esta a la
altura de su maestro, ya que ambos trabajos son realmente memorables y más estrenándose
en el mismo año, así no podían decir quien había copiado a quien.
“Lo siento por ti” esto fue lo primero que le dijo Baker a David Naughton al conocerse, pues las sesiones de maquillaje se le harían eternas a nuestro protagonista llegando a estar sentado hasta 10 horas sin hacer nada.
Estas son algunas de las curiosidades de esta fantástica
película y si en 40 años no has tenido ocasión de verla ¡a que esperas insensato!
Manuel Lendínez Gallego.
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